Los principios numerológicos de los pitagóricos corresponden con la idea de que el microcosmos refleja el macrocosmos, lo que implica que el universo manifestado, sus leyes y estructuras se reflejan en la constitución del ser humano. Se establece con ello una relación entre la creación universal y la creación humana, haciendo que esta adquiera un sentido trascendente. Así, la geometría va más allá de la ciencia empírica y se convierte en experiencia espiritual.
Podemos trazar un esbozo de la aritmología practicada por Pitágoras, que tanta repercusión llegó a tener en el mundo del pensamiento y las ciencias.
La base numérico-metafísica pitagórica se encuentra reflejada en los diez primeros números y sus asociaciones geométricas, pues los diez primeros números se consideraban elementos seminales del cosmos, esto es, en ellos estarían contenidos los principios esenciales del Universo, porque adicionándolos o multiplicándolos se encuentran todos los demás.