La historia real de una abogada que tras comenzar a conectarse con el mundo espiritual, decide hacer un pacto celestial: «no estar junto a ningún hombre hasta que el universo le conceda el deseo de encontrar a su alma gemela».
Su autora creía haber encontrado su lugar en el mundo de las togas, pero después del fallecimiento de su padre, en 2003, comenzó a visionar premoniciones que anunciaban lo que más tarde acontecería en su vida y en la de los que la rodeaban. En agosto del 2011 se sometió a una hipnosis regresiva y ello desencadenó la ruptura de su matrimonio y su conexión con el mundo espiritual. Actualmente trabaja en su consulta como Terapeuta especialista en Hipnosis regresiva a vidas pasadas, ayudando a las personas a alcanzar la felicidad en sus vidas.