He novelado esta historia, pero más allá del “velo”, los Maestros me transmitieron la Verdad, pues siempre estuvieron y están conmigo. Quien tenga oidos para oir, que oiga.
Esta web utiliza cookies propias y de terceros para mejorar nuestros servicios mediante el análisis de sus hábitos de navegación. Puede obtener más información aquí o cambiar la configuración.