En un reino remoto y olvidado en el que no transcurre el tiempo gobierna un rey insatisfecho. Todo en su vida es siempre igual. Jamás ha habido el menor cambio: ni sus súbditos, ni sus tierras, ni siquiera él mismo. Y todo permanecerá perpetuamente inmutable... a menos que obtenga un secreto que se encuentra más allá de las fronteras de su reino, un secreto que está en posesión de un ermitaño a quien nadie conoce... O, mejor dicho, casi nadie...
Un cuento que habla del Tiempo, de las estaciones del año y de la importancia de vivir plenamente cada instante.